Es una rotura parcial o completa de las fibras musculares a causa de un fuerte impacto (lesión traumática). Existen 3 grados:
En una distensión de grado I, el deportista experimenta una molestia ligera y una tumefacción mínima pero la movilidad es completa.
Una distensión de grado II significa que la palpación es dolorosa y permite detectar un defecto entre pequeño y moderado en la zona de la rotura fibrilar; esto, combinado con la tumefacción y la disminución de la movilidad, pueden dificultar la marcha.
Una distensión de grado III se caracteriza por un defecto palpable entre moderado y amplio en la zona de la lesión y por un edema mas notable, menor movilidad y un dolor más intenso que en las lesiones I y II.